¿Te has preguntado alguna vez cómo formar el espacio ideal para dormir? Si has estado jugando con la idea de una remodelación de tu habitación, ¡esta es tu señal para hacerlo! 

Cierra los ojos, e imagina tu lugar preferido en donde te puedas sentir tranquilo, relajado y seguro. Si tu habitación no fue de los primeros lugares que se te ocurrieron, ¡es que tal vez necesites hacer algunos cambios!  Es de mayor importancia que tu habitación sea el lugar principal al que llegues a relajarte todas las noches, ya que después de un día largo y pesado, tendría sentido que lo primero que quisieras hacer sea caer en tu cama dormido, listo para comenzar a soñar tan solo tu cabeza toque la almohada en tu sistema de descanso.

Un buen sueño garantiza que tengamos una menor cantidad de estrés en nuestros días, un mejor humor, mejor memoria, y una mejor reparación muscular de las actividades que se vivieron en el día. Así mismo, el que durmamos bien sobre nuestro sistema de descanso mejora nuestra concentración y efectividad en el día siguiente, que puede ser extremadamente útil en nuestro trabajo y escuela, ya que además de asegurar que harás un mejor trabajo, podrás prevenir accidentes mejor. 

Para lograr un espacio de relajación ideal, es importante mezclar los conceptos de arquitectura con psicología, para lograr los puntos estéticos que podrían inducirnos calma, al igual que tener un sistema de descanso adecuado para nuestro sueño. Para lograr esto, algunas recomendaciones son:

1- Elige tonalidades que te den calma: Si las sábanas de tus sistema de descanso son de tonalidades frías, como el azul, morado, grises, o colores térreos y arenosos, es más probable que tu habitación se vuelva un lugar que te de paz con el simple hecho de entrar, además, elegir tonos oscuros podrán aportar un sentido de elegancia a tu habitación. 

2- Añade iluminación cálida: Con iluminación cálida nos referimos a que uses bombillas de luz que sean amarillas en vez de blancas, y de preferencia con una intensidad suave. Luces así dan a tu cuerpo la sensación de un atardecer, ¡lo que podría ayudarte a inducir el sueño! 

3- Procura que tu sistema de descanso sea cómodo: No hay como llegar a casa a tenderte sobre un colchón que sea de tu agrado. Un sistema de descanso se compone de un buen colchón, y una base para dicho colchón, al igual que una almohada que sea capaz de darle soporte a tu cuello y hombros. 

4- ¡Mantén orden!: Es importante que en tu habitación tus cosas estén ordenadas. Si hay cosas en el piso, esto solo añadirá un estrés visual a tu cuarto, de lo contrario, si las cosas están guardadas y en su lugar, en más sencillo que puedas llegar a relajarte en tu espacio. Si sientes que simplemente no tienes dónde guardar más cosas en tu cuarto, ¡te recomendamos guardar cosas en cajas debajo de tu sistema de descanso! 

5- Prende una vela o un difusor de aromas: olores como la lavanda y la menta pueden hacer que tu cerebro reconozca más fácilmente la hora de dormir, por lo que recomendamos que 30 minutos antes de dormir, prendas tu vela o difusor por un momento. ¡Pero que no se te olvide apagarlos antes de irte a dormir! 

Esperamos que después de todos estos consejos te sean de utilidad. ¿Qué esperas para ponerlos en práctica?